El presente más inmediato y el futuro de la expresión plástica española se dan cita en una exposición que aglutina a los ganadores y becados por el proyecto Generaciones, de la Obra Social Caja Madrid.

Una buena muestra de la calidad de los trabajos la da la nómina de integrantes del jurado, compuesto por el conservador Jefe del Museo Thyssen Bornemisza, Guillermo Solana; Valentín Vallhonrat; la comisaria Aurora García; el conservador jefe del Macba, Bartomeu Mari; y la directora del Centro José Guerrero de Granada, Yolanda Romero. El Consorci de Museus de la Comunitat Valenciana se ha sumado al trabajo llevado a cabo por la Obra Social de Caja Madrid y ha organizado una exposición con trabajos de 33 jóvenes premiados, becados y cuya obra ha sido adquirida por la entidad financiera, en el Centre del Carme de Valencia.

De esta manera, el antiguo convento carmelitano se convirtió durante semanas en la casa de la producción artística de más rabiosa actualidad, tanto por su temática, como por las técnicas empleadas como elementos vehiculadores de la expresión. Las miradas de estos artistas reflejan, a través de expresiones plásticas “tradicionales” pero, especialmente con las “nuevas tendencias” como la videoinstalación o la fotografía, los gritos que les suscitan las injusticias y las reflexiones que nacen de la vida cotidiana.

De esta manera, el dibujo, la animación, la instalación, la escultura, el vídeo arte y las últimas tendencias, como el “computer art” se citan en esta muestra y reivindican su vigencia y su complementariedad.

Las obras centrales de la exposición son los tres trabajos premiados en 2008 por la Obra Social Caja Madrid, con una dotación de 15.000 euros cada uno. Las piezas ganadoras son “Catarats (Cataratas)”, de Carlos Aires (1974); “Aislado 7”, de Hisae Ikenaga (1977); y “Soupir”, de Zuhar (1981). Ciegos ante la catástrofe La primera de las obras corresponde al trabajo de un joven licenciado en Bellas Artes Carlos Aires y se trata de una videoinstalación de aproximadamente 7 minutos y medio que muestra imágenes reales, obtenidas a través de Internet, de diferentes catástrofes ocurridas recientemente. Sin embargo, todas ellas se nos muestran turbias, borrosas, como si el observador tuviera cataratas. Simultáneamente, la narración corre a cargo de personas ciegas que definen elementos vinculados a la tragedia, como la muerte o la oscuridad.

Incomunicados
El trabajo de Hisae Ikenaga está elaborado con Páginas Blancas recortadas y pegadas. Con ella, la mexicana revela la incomunicación que generan las grandes ciudades, en las que los listines telefónicos, por ejemplo, clasifican y homogeneiza la complejidad social. En la obra premiada la información aparece representada como una cordillera de datos que son imposibles de asumir.

Una maleta de emociones
Por su parte, la joven vasca Zuhar Iruretagoiena refleja con su “Soupir” (suspiro) las sensaciones que le generó un viaje a África y demuestra cómo es posible asimilar la sensibilidad que puede transmitir un baobab milenario a través de una instalación mixta de escultura y fotografía digital. Además, la exposición incluye las ocho obras distinguidas con mención de honor, de 6.000 euros cada una; las 13 obras seleccionadas de entre las que Obra Social Caja Madrid ha adquirido cuatro para su colección; y los siete proyectos becados que se presentaron en la feria de arte contemporáneo ARCO del año 2008.

Itinerancia de la exposición
La exposición que se ha realizado en Valencia fue inaugurada en la Casa Encendida de Madrid aunque en la capital valenciana se incluyeron por primera vez las obras becadas. Tras su paso por el Centre del Carme, la muestra viaja a Valladolid, Barcelona y Sevilla.

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